Que vengan aquí. Que allí la situación no está bien. Que allí
no conseguirán lo que quieren. Que aquí si lo harán. Y vienen, y sufren, y trabajan en lo que nosotros no queremos. Y viven, convencidos de aquellas
palabras, de aquellos sueños, de aquel futuro.
Nos dicen que vayamos allí. Que aquí la situación no está bien. Que aquí no conseguiremos lo que queremos. Que allí si lo haremos. ¿Cómo es la
segunda parte? Vamos, sufrimos, y trabajamos en lo que ellos no quieren. Y
vivimos, convencidos de aquellas palabras, de aquellos sueños, de aquel futuro.
Aún no conozco a nadie
que haya encontrado allí lo que buscaba aquí. Pero allí, funciona mejor lo que también
puedes ser aquí. Allí, entra mejor lo que tenemos aquí. Allí, sigues creyendo
lo que te prometieron. Pero, la verdad es que no consigues lo que no consigues
aquí.
Ir o no ir.
A.Irazusta
¿Y si solo eres allí? ¿Y si el que te dice que te vayas es el que no tuvo valor de ir? ¿A donde y para que? Segundas partes nunca fueron buenas. Autosuficiencia; autoengaño
ResponderEliminarDemonocrazy, touché.
ResponderEliminar¿Y cómo saber si allí seré? ¿ Cómo saber si al final me arrepiento? ¿Saldrán de mi esas palabras: "vete que yo no tuve valor"? ¿Puedo? ¿Por dónde empiezo si aún no se responder? La respuesta, ¿dónde está?
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